A pesar de que muchos de nosotros preferimos evitar los dentistas a toda costa, no podemos negar que la salud oral y la higiene es un aspecto importante de nuestra atención personal. Puede parecer un inconveniente, incómodo o incluso dolorosas para mantenerse al día con los chequeos regulares y limpiezas cada 6 meses. Sin embargo, una gran cantidad de estudios científicos está empezando a mostrar que el cuidado de la boca puede reflejar lo bien que se encarga del resto de su cuerpo. En muchos sentidos, la boca es una ventana directa al resto de su mundo. Dicen que somos lo que comemos. Esto es cierto en más de un sentido.
Los dentistas como para fomentar la atención regular y rutinaria de los dientes y las encías. Esto incluye las tareas obvias de usar el hilo dental todos los días y el cepillado con pasta dental que combaten la cavidad. Algunos dentistas también pueden recomendar el uso de un enjuague bucal u otros productos para ayudar a combatir los elementos que causan la enfermedad de las encías y mal aliento. Sin embargo, el mal aliento es una consecuencia relativamente menor de una mala higiene bucal. Permitiendo que las bacterias y azúcares se acumulan en la boca puede promover otros problemas graves de salud.
La diabetes es una enfermedad en la cual el cuerpo no puede regular la descomposición de los azúcares que se ingieren en la dieta. Es una enfermedad que es particularmente difícil en los riñones y muchos diabéticos a largo plazo terminan en diálisis regular o incluso puede requerir un trasplante de riñón. Si no se cepilla los dientes después de comer alimentos azucarados y permitir que los azúcares que quedan en la boca de forma indefinida, que están inhibiendo los mecanismos naturales del cuerpo para descomponer la glucosa en moléculas más pequeñas y que utiliza como fuente de energía o almacenamiento. Algunos pacientes con diabetes encuentran que sus niveles de azúcar más difícil de controlar cuando no se mantienen al tanto de sus hábitos de higiene oral. Como tal, los dentistas recomiendan que todos los diabéticos practicar un buen cuidado de la salud oral y cuidar a cepillarse los dientes después de comer cosas dulces. De esta manera, el paciente es capaz de garantizar sus niveles de azúcar son manejables y evitar cualquier consecuencia negativa de permitir que sus azúcares de repente se elevan demasiado alto o demasiado bajo.
La acumulación de bacterias en la boca también puede ser muy peligroso. Si se permite, las bacterias se multiplican a un ritmo exponencial y puede conducir a la formación de placa y sarro lo largo de la línea de las encías. Placa y el sarro conducen a graves problemas en las encías como la gingivitis, que es una inflamación dolorosa ya menudo debilitante de la línea de las encías. Este mismas bacterias pueden entrar en el torrente sanguíneo a través de un pequeño corte o una herida en la boca y pueden incluso conducir a la infección del sistema sanguíneo. Este tipo de infección de todo el sistema es muy peligroso. Si la bacteria tiene la oportunidad de implantar en la válvula de una cámara del corazón, los efectos pueden ser devastadores.
Como tal, es importante para mantener su salud oral y la higiene en cuenta al planificar medidas preventivas para cuidar de su bienestar general salud. Dentistas en su área le puede dar consejos y directrices para garantizar que se mantenga saludable de pies a cabeza en los años venideros.