se baña todos los días? Te vistes? ¿Qué pasa con la conducción de trabajar? La rutina que la mayoría de la gente consigue en el mismo día implica tareas básicas a día. Es probable que al menos una vez al día, y probablemente dos veces al día, se cepilla los dientes. Lo hace debido a la higiene dental es importante. Entonces ¿por qué entonces tanta gente teme ir al dentista?
Si bien hay quienes no les gusta volar porque estar a 36.000 pies parece aterrador, es raro que una persona tiene miedo de los pilotos. Están bien entrenados para operar los aviones de millones de dólares y están ayudando a que el transporte de una ciudad a otra. Un dentista no es diferente. Él o ella ha pasado por años de estudio y está proporcionando un servicio al cliente. Claro, nadie quiere ir a través de un canal de la raíz, pero parte de ser una persona responsable implica el conseguir una limpieza dental y aprender acerca de cualquier problema que pueda tener en un punto que se pueden abordar, y no después de que sea demasiado tarde.
es importante considerar que los dentistas como personas. Sí, a veces sólo se ve en un escenario de trabajo, pero es muy útil para aliviar el miedo cuando te das cuenta de que estas personas son como tú. Tienen familias, disfrutar de comidas al aire libre, juegos de pelota, pasar tiempo con la familia, y las buenas películas. A veces es tranquilizador para hablar con su médico acerca de sus vidas e intereses antes de entablar una relación médico-paciente para que se les ve en una luz diferente, más humano.
Hay aquellos que evitan ver a los doctores también. Es de conocimiento común que la detección temprana es la clave para la prevención de muchos problemas graves. ¿Alguna vez ha tenido un resfriado o la gripe que no fueron atendidas y se convirtió en neumonía o algo peor? Al ver a un dentista un par de veces al año es la mejor manera de garantizar la salud detalle.
No sólo ver a su dentista que mantendrá hasta a la fecha en su propia condición, pero es un gran recordatorio de cómo cepillarse correctamente los dientes, hilo dental, y continuar con el mantenimiento que se tarda un minuto o dos al día, pero puede ser fácilmente omitir. Al ver a un profesional puede ayudar a recordar por qué ese par de minutos al día, merece la pena.
Como adultos tenemos la libertad de hacer cualquier decisiones que elegimos. Si eso significa no tener la boca miraba, que así sea. Sin embargo, cuando somos niños y nos decidimos no hacer la tarea, se nos recuerda por los padres y profesores que saltarse la tarea significa no material, lo que se traduce en una mala calificación y que puede afectar a donde vaya a la universidad y qué trabajo se obtiene el aprendizaje. Hay consecuencias de ambas acciones y la inactividad. Sea consciente del impacto de las decisiones que toma, independientemente de lo que son.